Viniste con mayor presencia a mi memoria
en un día de lluvias, al igual que esperanza,
repartiendo esa alegría tan llena de historias
en el corazón de quien te ama por tu bonanza.
Sangre de mi sangre, vida que llevo en venas,
emoción que me llena el pecho con felicidad
saber que tu vida vive en la mía sin la espera
de ver que hoy, por cada día, te amo aún más.
Por recuerdos que se perduran de ti felizmente
es como si nunca te hubieras ido físico de acá
y aunque la materia sea vil por dejar sin verte
se que en donde estés, tu alma conmigo estará.
No quiero nada sino tan solo esperar mi existir
haciendo de la vida el ejemplo aprendido de ti
amando con pasión y entrega todo hasta morir
sabiendo tu amor iluminó lo que por vos viví.