Ofelio

MI DESASTRE

Tú, epicentro de mis movimientos telúricos

poniendo a temblar mis ganas, mis ansias.
Onda elástica que derribas mis penas,

haciendo de ellas escombros de alegría.

Tú, ola suprema de un tsunami que todo lo arrasas.


Tornado y viento huracanado que me envuelve  

dejándome en el sitio seguro: el cobijo de tu cuerpo.

Tú, granizo que caes de súbito golpeando los latidos

de mi corazón.
Tu voz, relámpago que lo ilumina todo.

Después de tanto, soy un superviviente cayendo

en cuenta que no existe fenómeno natural con

la magnitud del resultado de tus locuras. Y al final,

eres tú la calma.