I
Mujer de temple radiante
Mejor dicho un diamante
Que Dios tallo día a día
Con esmero y dedicación
Hasta sacar de tu interior
La belleza y el esplendor
Que se escondía bajo la escoria
Porque la maldad y la discordia
Enveneno tu corazón
II
Pero Jesucristo con su amor
Y su bálsamo restaurador
Fue sanando las heridas
Que llegaron a tu vida
Para procesarte por fuego
Y sacar el lindo destello
Que guardabas en tu interior
Hasta convertirte en una joya
De valor incalculable
III
Eres mujer aguerrida
Aquella que no se da por vencida
Hasta lograr lo soñado
Porque en Jesucristo has centrado
Toda tú fe y tú esperanza
Y te aferraste al difícil proceso
Para llegar a ser el diamante
Que de manera radiante
Hoy brilla en el universo
IV
Hoy te sientes complacida
Por todas las maravillas
Que Dios le dado a tu existencia
Y te ha dado la linda experiencia
De lograr lo imposible
De soportar lo insufrible
Porque todas quieren ser diamante
Pero pocas quieren ser talladas
Por el fuego de la unción
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAUL-VENEZUELA
08/10/2.017
09:55 a.m