En Octubre el calor mutuo buscamos,
puesto que nuestros besos tiernos
amor más intenso emanan,
el aire con aromas nuevas preñado,
el encanto de hierbas de otoño
En Octubre nuestro labios con dulce
sorbos prolongados se bautizan
al compartir una copa de vino nuevo,
su dulzura una sinfonía ardiente
en los cuerdos de nuestros corazones toca
En Octubre bajo los pies una alfombra crujiente
antes de que la colcha de hojas caídas
por ráfagas celosas sea arrastrada,
al desvestir, en la luz débil de la tarde,
manniquíes asustadas de sus trajes otoñales
En Octubre la cosecha de nuestros labores recogimos,
y nuestra orientación interna reflexionamos,
la brújula para seguir nuestras líneas de la vida,
para navegar nuestro barco a puerto seguro, mientras
la natura para su descanso invernal se prepara
La foto tomada en Sinsheim