Si por decirte lo que siento
he de sufrir tu silencio
la asumiré como un soldado
con coraje e hidalguía.
No temo las consecuencias
de mis acciones: soy responsable
de cada una de mis palabras
y de mis pensamientos.
Si por decirte aquello
que estoy sintiendo cuando
te veo, no quieres verme
más en tu vida, asumiré
con entereza y firmeza
tu decisión aunque
por dentro esté destrozado.