Soy como eterno suspiro,
Convertido en obsesión,
Entre un constante delirio
De un enfermo corazón;
Sólo por ella respiro
Ella es la única razón,
De este exquisito martirio
En adorada prisión;
Voy perdido en el anhelo,
La más nítida ternura;
En ese infinito cielo
En esta eterna locura:
La razón de mi desvelo
Y el cenit de mi aventura…