Carlos Justino Caballero

MIS NOSTALGIAS AÑOSAS

 

 

Detrás de un cerro, otro cerro y después… hay otro más

parece que la tapera está muy lejos nomás.

 

Todos se miran iguales aunque existan diferencias

y la distancia incrementa ese tinte de apariencias.

 

El sendero de herraduras tiene siglos de pisadas

y yo pienso en el gauchaje caminando en madrugadas.

 

Envuelto en tarde con vientos, andando yo despacito

paso a paso acorto espacios entre mi ser y el ranchito.

 

Así en este mar de piedras, de espinillos y de talas

el viaje se está alargando, que acá no existen escalas.

 

Con una luna argentada o el sol quemándose en cobres

sombras o luces no cambian mis pasos lentos y pobres.

 

Cómplice del paisaje me distraigo en lo que veo

y yo no quiero cambiarlo pues cambiaría el deseo.

 

Y demora mi llegada al rancho que tanto quiero

no sé por qué las medidas de mi ansiedad van primero.

 

Pero ya voy a llegar, sólo contaba estas cosas

para acortar las distancias con mis nostalgias añosas.

 

 

De mi libro “Desde aquella Strelitzia”. 2014 ISBN 978-987-1977-32-1