Día y noche tu nombre fui escrutando,
lo busque desde la a hasta la zeta,
ese nombre lo uní con cada letra
con toda bella letra que encontré.
De una infinita esencia te he creado
hilvanándote entre sonoros ritmos,
que marcaron la esencia de un destino
¡enmudeciendo todos mis suspiros!
Burbujas de sonido en partitura
no brotan los delirios sin sentido,
hasta quedar tatuada en mi memoria
y para siempre, la palabra amor.
Hugo Blair M.
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