La noche hace apertura
otro día esta muriendo,
la noche se clava como
una astilla, la crisálida
se va rompiendo.
Luminoso satélite que estas
al otro lado de un rojo nimbo.
tu brillo lo lleva el rayo
que cubre el firmamento
y en el mismo, vertiginoso,
su luz da paso al estruendo.
Luminoso satélite solo espero
que te asomes por un hueco
del nimbo, y seguir con los
soliloquios que a nosotros los
noctambulos nos lleva al infinito.
El alrededor es tan profundo
y el alma se desborda como un
río que a crecido. el frío se interna
en el cuerpo, me aherrojaré
al momento, hasta que el alba
se ponga, y desaparezca este
lúgubre sentimiento.
Hasta la noche.