Tan sencillo como es saber,
que en el amar y el querer,
no hay tiempo, ni hay medida,
sin equivocarme diré,
que mucho ame y sin medida.
-
Quizás ame mucho menos,
de cuanto mi mente imagina,
mucho más, o en demasía,
tal vez, quise plenamente,
y el no supo cuánto quería,
ni si eternamente amaría.
-
Bien adrede o a conciencia,
no pudo guardar el amor,
sentimiento noble y furor,
que profesò floricienta,
junto a años de inocencia.
-
Pero si se, que amé tanto...
con sangre de mi cuerpo y alma,
en mis entrañas sembró vida,
y diò me hijos cual tesoros,
a quienes amo y adoro.
-
Al marchase un día cualquiera,
y estela de dolor dejase,
temblor a mi alma recorriera,
y en interminable sollozo,
fue mi llanto muy fogoso.
-
Desprendió de mi, su luz,
el calor del tibio cuerpo,
y en un mísero instante,
vino oscuridad sin lumbre,
a hacer mi vida costumbre.
-
Entonces, no sé, si sufría,
por él, por mi, por ausencia,
camino a otro puerto iría,
espejismo en su fantasía,
busca nuevos amaneceres,
y apasionados placeres.
-
Inflexible tiempo ha pasado,
sé que él vive en soledad,
y se ufana de felicidad,
afirma su vivir de ahora,
que paz tiene en su alcoba,
y de mi nada ha necesitado.
-
Pero muy dentro de mi ser,
Tengo certeza de creer,
que no es así, y que miente,
y en las sombras me extraña,
hombre orgulloso y piraña,
¿Acaso le conocí en balde?
-
Nunca quiso pena admitir,
ni destejer telarañas,
que separan mis murallas,
y arrojado al laberinto,
tonto perdido y distinto.
-
Por mi parte hice promesa,
de olvidar amor que daña,
que hizo de mi ave traviesa,
en mundo frío que engaña,
siempre lleno de tibiezas.
-
Hoy vuelvo a viajar a bordo,
del recuerdo y hago poema,
puesto en cuartel por tema,
a compartir con amigos
¿Y a quien importa el morbo?
-
Nunca mas yo volví a verle,
salvo en perdidos sueños,
donde de vez en cuando,
a darme una caricia viene,
tibio beso, mirada triste,
y le obsequio mi sonrisa,
-
Bañada en llanto despierto,
lamento no sea feliz,
ni el, ni yo, ni la lombriz,
en este universo incierto,
de luminosas estrellas.
-
Desdichados nos hizo saña
tarde para quitar marañas,
e incontables lágrimas ¡río!
de desesperanzas y olvido,
y en mar echados los lirios.
-
El allá, quien sabe adónde,
o donde su misterio esconde,
yo acá en jardín sobrevivo,
lugar cuando en paz vivimos,
y bellos sueños construimos.
-
Escribo versos y añoranzas,
soñando en la noche oscura,
con luces de la eternidad,
los luneros en soledad.
-
¿Y yo que Extraño?
calor de su espalda y mano,
y ¿Èl quien sabe, si extraña?
solo Dios conoce quebranto,
así como a mi triste canto.
-
Y no se trata de perdones,
ni de lamentos del hombre,
mi pobre corazón perdona,
tal ingratitud y maldad,
Hace, hace mucho tiempo ya.
-
Imposible volver el tiempo,
para pronunciar su nombre,
mirar sus ojos y decirle,
-Te amo mucho- no te dejaré
o tal vez, juramento darle:
-
¡Olvidemos el pasado, y todo el camino andado!
te entregaré mi presente, con ideas florecientes,
cuando ya no existe futuro, sino viaje a la eternidad.
¿Que tontería verdad? ¡Si la vida es vanidad!
-
Raquelinamor
Octubre 23, 2017