Si me respiro ese beso que de tus labios renace,
sumisa al pensamiento que delata tu mirada,
temo perderme en tus dedos ladrones de mi cordura,
envuelta entre tus caricias las que iluminan mi alma.
Y es que ya no se si muero,
o revivo con tu boca,
o tan solo es la locura,
del amor que te profeso,
si tan solo por un beso,
se ilumina mi universo,
quiero mi luz encendida,
aunque se quiebren mis huesos.
Quemaré en el fuego eterno, la lágrima de la rosa,
sembraré los pensamientos del jardín de nuestra alcoba,
y cuando llegue el invierno calentaré nuestro nido,
cubriendo de ramas blancas los rescoldos de las sombras.
Cuando la nieve cubriendo,
haga desaparecer mis huellas,
siempre quedará una estrella,
que prenda fuego al amor,
nunca muere un sentimiento,
cuando un corazón sincero,
solo mirando a los ojos,
hace temblar de emoción.
Dolores Egea( Lolaila)