No sé cómo perdonar al pasado.
Cerré la puerta pero a través de ella te hablo.
¿Te abro de nuevo y te dejó pasar?
Si lo hago soy un idiota, porque sé que me vas a dañar
A quién quiero engañar,
te juro lo intentó,
todavía no aprendo,
no sé cómo olvidar.
Abrí la puerta y ya no estabas del otro lado;
pasó el fantasma de tu recuerdo llorando
¿Por qué todavía me culpa? ¿Por qué me sigo culpando?
¿Acaso será verdad? ¿Todavía te sigo esperando?
Suena la puerta de nuevo pero es imposible porque ya estás adentro,
es el futuro gritando y preguntando - ¿¡Qué hago me voy o me quedo!? –
¡No quiero dejarte! Aunque vos ya te alejaste, antes de tu partida te pregunte: ¿Acaso nunca me amaste? Guardaste silencio y continuaste para delante, y me quedé con la duda: ¿Acaso alguna vez me amaste?
No quiero alejarme.
No quiero.
No quiero alejarme