De despedida
El cielo me lloraba tu despedida
Y caían semanas de desespero
Era solo imaginación la pincelada
De tu cuerpo sensato
Mientras en el silencio
La pintura desvanecía cada palabra emitida
Que nunca se dijo
Quizás fuimos amantes, locos, niños,
Mareados,
Por la fuerza magnética de la tierra
Y aquí estoy de labriego
Listo para morir y nacer diez veces en tus manos alargadas
Déjame entrar en tus encías
Buscar el verso mas puro
Saciarme como vertiente altiplánica
Y nadar bajo esas aguas cristalinas
Donde logro ver
Una premonición clara
No te alejes,
La sombra se desfigura
y sólo logro captar temores
Más que despedida una muerte
De la que todo es parte
Y a su vez nada,
Porque el tiempo no perdona
Y la relojera no envejece
Pero el tiempo no observa,
No se detiene
Como ha de esperar entonces
Esos cabellos rizados
Tocar como entonces
Tu alma honesta,
Y sí el tiempo tuviera lógica,
Estaríamos todos perdidos,
Pues siempre se llega al lugar correcto
En el momento más inesperado
Tan precipitado fue,
Que quizás no me di cuenta
Como me retorcía en las enredaderas
Del universo
Porque ya te habías ido
Y yo no estaba preparado para perderte.