Mis pies tibios
se hunden en la playa,
mis huellas dirán
que por allí pasé
sintiendo la brisa
deslizarse por mi piel.
Solo me acompaña
el tenue brillo del sol,
que parece ahogarse
en el horizonte
diciéndome adiós
Sin nadie que me reclame,
sin nadie que diga que hacer,
corro,río,lloro....
el mundo está conmigo y yo con él
ya nada necesito...la paz encontré.