Tormentas, rayos y oscuridad
árboles muriendo entre las llamas,
lágrimas derramadas ante la adversidad.
Están, rezándole a Satán,
pidiéndole que actúe sin piedad,
que lo mejor es la maldad.
Pero querido mío yo te contradigo,
y te exijo,
que confieses hoy tus actos ante este tribunal,
la sentencia dictamina su ingreso en Azkabán,
prisión federal del Condado de Michigan,
quedas condenado
a regalar amor y paz,
el resto de tu vida.
Todos los días de tu vida.
Todos los días de tu vida.
Todos los días de tu vida.