\"Al Dios no conocido, que no se podría comprimir en imágenes talladas por hombres ni por la naturaleza, que no tenía límites su poder, majestad ni eternidad. Al Dios que no tenía principio ni fin, un Dios invisible, poderoso pero real. Un Dios que le coloco límites a los océanos, que colgó el sol y la luna como un llavero en el firmamento, un Dios tan potente, tan grande y sublime que demostró su amor a la humanidad entregando a su único Hijo para morir en la cruz, que extendió su misericordia y perdón sobre todas las generaciones, a ese Dios sea toda la gloria, honra, honor, imperio y poder por todas las eternidades. Amén... Lord Vanvle