argantonio

Aquel cielo azul

No me interesa la gran ciudad,

que se ufana de sus estatuas,

o presume de sus ceremonias fátuas,

prefiero mis mentiras a su verdad.

 

Decídme donde vivió el poeta,

decidme si murió de incosoláble pena,

o si hubo un traidor en su última cena,

decídme de que se alimentó el buen asceta.

 

Aquel poeta como todos,

Jugó,vivió, amó y sufrió,

y al irse vió el azul de su niñez.

 

Despreció los mármoles pos los lodos,

de buena fe a los hombres sonrió,

y murió recordando su cielo por última vez.