J.Nuñez

Convergencia

Fueron dos extraños que la casualidad juntó.
Ambos mirando a la nada en su mente se pensaban,
sabían que de hace tiempo la nostalgia que arraigaban
la debían a un propietario que al buscarlo no se halló.

Visualizando su sueño, ella al lado de él, pasaba
y el destino les gritaba ya con desesperación:
\"¡A tu lado está a quien buscas!
deja de mirar el piso y observa a tu alrededor\".


Palabras que fundidas en la brisa sus rostros acariciaban.
Pero ante oídos sordos, palabras no dicen nada
a una mente ensimismada que los ojos nunca abrió.