¡Basta ya!
Dejad de recordarla,
Olvida su puta locura,
Reconcíliate con su futuro
No con su pasado.
Mátala, de una vez por todas,
No prolongues lo inevitable;
Así como una vez
Hubo muerto el amor,
Ahora le toca al destino.
No pienses en nada
Que no hallas hecho por ella,
Seguramente ella tampoco lo hiso.
Cuando pases a su lado
Puedes hacer dos cosas
Mirarla fijamente
Con un único significado
O pasar de largo
Y flotar en el horizonte.
Si de verdad te quiso
Te devolverá la mirada.
Si sólo fue un sueño
Ambos marcharan impunes,
Frente a una tarde
De luna celeste,
Gris,
Como el cielo en sus madrugadas.