Arrancarte quise, de mi corazón, ingrata.
Cuando cuenta me di de tu maldad, innata.
Matar en mi este amor que me arrebata.
Y erradicar de mi alma este amor que me mata.
Sacarte de mi mente, cosa fácil;
Pues gobernar la mente, eso es posible.
Más de mi corazón sacarte, que difícil
Porque mandar al corazón, es imposible.
De mi mente saldrás, lo sé, algún día
Porque el tiempo todo cura inevitablemente
Más nada me dará más alegría
De mi corazón borrarte más que de mi mente.