Ese infinito instante,
Donde todo surge,
Donde todo desaparece.
Donde el sol se esconde,
Donde florece una flor,
Donde el viento hace reír al otoño,
Donde grita una lagrima,
Donde el alma bosteza.
Donde dos miradas se encuentran.
Donde los espejos se reflejan,
Donde algunas veces muero,
Donde se enciende una luz,
Donde resucito,
Allí,
En las tímidas intermitencias,
Que vuelan desordenadas como luciérnagas en los albores del alma,
La encontré,
Dormida, sola, avergonzada.
Era un silencio,
una voz,
Una mujer,
Una palabra al revés,
Era mi vida,
Era su llanto,
Era poesía.
Pedro Fassi