Cae la noche; la Lumbrera Mayor se oculta en el Oeste; el Cielo se torna oscuro; resplandecen los astros a lo lejos mientras acompañan a la Luna, la cual se viste de Gala...
Entonces, alzo la mirada para contemplar la hermosura del Cosmos. Y el silencio se apodera en el instante del momento, mientras que los grillos entonan su cántico de Estridulación.
Cae la noche, y así como las estrellas y la Luna, del mismo modo tu mirada resplandece.
Cae la noche, y en plegarias le agradezco inmensamente a Dios por haberme dado la dicha de haberte conocido.
Cae la noche, y en esta soledad, bajo el cielo infinito embellecido por la Lumbrera Menor, estoy pensando en ti...