Pies descalzos,
ropa remendada,
brillo en los ojos,
manos ensuciadas,
A trabajar a diario,
le enseño su padre,
y valores nobles,
le enseño su madre.
Con sus hermanos,
a las canicas jugando,
asistiendo a la escuela,
o en el rio pescando.
Tarde de futbol,
dos piedras de marco,
de trapo la bola,
la cancha un charco.
Al pie del cerro,
vivía en un rancho,
su sucio sombrero.
colgado en un gancho.
La luz natural,
cuando se marchaba,
con una canfinera,
su casa alumbraba.
tiempo de descanso,
de tablas su cama,
la felicidad siempre,
encendida cuan llama.
Decían que era pobre,
el niño campesino,
te cuento era rico,
con esto termino.
J.Moscoso.
Derechos de Autor reservado.
José Antonio Moscoso Vega.
Costa Rica, Puntarenas, Corredores.
08 de noviembre 2017.