Nos debatimos
entre la noche y el día
marchitan latidos
tinieblas y neblinas
Centellean astros
pero sin rastros
del cese la tortura
¿Cuál augurio?
Y Saturno se aleja
dejando la tierra al olvido.
¡Salgamos del vómito!
De las estructuras
vagas ingenuas
vacías.
Hacía lo nítido.
Adolfo D\'Erizans.