¡Breve la ilusión! y breve el olvido,
Adiós no es para siempre, amado amigo,
me atrapaste entre letras, te bendigo,
breve ilusión, aleteo de sirenas,
que deja triste un corazón de penas,
y tan corto, tu fluir me trajo al río
llegado con la fuerza del suspiro,
en el sutil camino de la esencia
y que tan corto, despidió su trino.
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Apenas ráfaga del frío invierno,
o del trinar del ave de los tiempos,
llegado a mi alma cual divino templo
en la eterna soledad que mal deploro
fugaz causa es del destino adverso
que sollozante su perdón imploro
-
Versos que en mi ser, eran bellos óleos,
Pintados al pincel de su sonrisa,
en el océano de un mar de sueños,
obra magistral platea de sus dedos,
dejarè de ver, pues acabó la tiza,
letras llevadas por la ingrata brisa,
sin más aire para las suaves caricias.
-
No hay momento para la despedida,
la noche sin aliento cae deprisa,
adiós sorprende, efímera ilusión,
penetrada cual llamarada de amor,
sin encontrar la llave al paraíso,
en desquiciados sentidos sin aviso.
-
Me hiciste soñar un breve instante,
y volvió a sentir mi corazón amante,
el fuerte palpitar del ave herida,
que demanda adiós sin despedida,
señalando abrir la puerta de salida.
-
Adiós breve ilusión, adiós canción,
mar de poesía, el imposible amor,
¡Cuán tarde! Llegaste, soplo a mi vida,
De ti me separa el horizonte ignoto,
uno es el cielo extraño que mitiga,
y el otro es el mar que me castiga,
aunque parezcan cercanos los remotos,
¡Jamás amantes! en el podrán juntarse.
-
No es permitido el juego del soñar,
vetado en azules colores los hados,
pues zafìro brillando vive al lado,
camino de gladiolas, fiel al destino,
y presto a remontar inquietas olas,
pretendiendo sus líneas adivinar.
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Solo recordaré una fotografía,
nada hubo, en pasión desconocida,
una sonrisa divina, ojos de ángel,
un hermoso despertar alucinante,
poemas que hacen fibras vibrantes,
en corriente sangrante de mis venas.
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Ahora regresarè a antiguos sueños,
de amaneceres con besos sin dueño,
brazos de Morfeo, juego y devaneo,
donde verte sonreír será un consuelo,
escuchar tu voz en alegres trinares,
y aliviar alma viajera de los mares.
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¡Adiós! ¡Alma gemela, alma mía! vuela,
sè feliz adondequiera, siempre vuela,
tal vez, en vida menos gris vuelvas a mi,
cuando nazca un nuevo sol de primavera,
y se crucen tus ojos frente a mi ribera,
como estela de luz o fuego humeante.
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Entonces sentiré deseos de amarte,
veré la vida reflejada en un pañuelo,
junto a las estrellas de noche clara,
y oirán melodías de ángeles en vuelo,
haciendo bellos coros de sus cantos,
celebrando al destierro de tu duelo.
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No pude conocer al cuerpo navegante,
pero si toqué su alma encantadora,
mágico levante de mi despertar,
y segura estoy que en otra vida
más adelante, he de encontrarte
¡Alma perdida! llena de hechizos,
jugaremos felices entre átomos
del universo de lunas y de nòmos
y sabrás que llegaste al paraíso.
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Raquelimamor
13/11/17