Llegaste,
con la elegancia de la luna,
el misterio de la noche
y tu sonrisa de fortuna.
Pero,
sentimos en el corazón
tiempos que no coinciden
y excusas que sin razón,
por nosotros deciden.
Sucumbimos a miedos
y finales no esperados,
e impusimos distancia
a sueños anhelados.
Pero el tiempo
y un poco de paciencia
lograrán cultivar
este amor con sapiencia.