Resuenan mis letras como ecos de mil mundos
salpicando los resortes de miedos adormecidos
Reverberan las palabras sobre las hojas ocres
empujadas aquí y allá por este aire envilecido
El viento infausto se ensaña con mis ojos,
desgreña mis cabellos , arranca mis ropajes
llevándose mis pensamientos en su grupa
raudamente, lejanamente, donde yo no alcanzo
Me encuentro en un erial, desprovista de emociones
cubierta apenas por el recuerdo de letras imprecisas
que con avidez mis poros absorben,
se diluyen en mi salvia,
se infiltran en mis huesos
y ya soy sólo palabras que ruedan por el polvo ,
o se disgregan en las gotas infinitas de lluvia .
Quizá algún día germinaré en este árido desierto
echando raíces de cariño y tallos de esperanza