Visitando el pasado, aprovecho y
escribo estos versos que te debía,
del mismo modo que la vida, ya vencida,
te debía una vida mejor
Pero en este laberinto de la vida
no se trata de deber ni de vencer,
sino de vivir, y es por esto que esta copa de vino
bebo para evitar tu olvido
Y aunque este verdugo no devuelva lo debido,
que tu voz y tu vitalidad absuelvan
y pervivan en el vacío lóbrego
de esta fría noche de noviembre