Hoy vengo cansado
de andar por la vida
de la pluma enamorado
y a beber el agua que ella convida
siento no el sudor, sino la herida
clavada en el costado
las manos puestas en el arado
y la mirada perdida
es mi amiga, y lo confieso
y tengo que cargar con ella
no brilla, pues no es estrella
pero es carne de mis huesos
en el horizonte me recreo
de la distancia que hay
entre la lágrima y el beso
y lloro solo por eso
me abanica la soledad
páramo del universo
en una jaula de cristal
tengo yo el corazón preso
donde viene y donde va
cacharro que tanto anda
con las bielas desgastá
los sueños de la infancia
quisiera y quisiera cantar
a la enfermedad, y que me abandone
para poderla olvidar
y borrar sus tristes renglones
que poco cuesta contar
desvaríos y desazones
que poco cuesta soñar
sin saber lo que supone
ya está triste el camino
y solo el caminante
las pisadas en el olvido
callosas las manos, sin guantes
comemos el rancio tocino
el pan duro, de antes
la vieja choza nos cobija
en un futuro distante
hasta mañana si Dios quiere
dulces sueños al abrigo
que nos cobija siempre
en este triste cortijo
pan duro y hasta mañana
el catre es duro y no tiene paja
nos espera un día largo
guarda el violín en su caja...