Juventino Pérez

No olvido

No olvido

 

No olvido de tus suaves manos,

Que recorrieron en mi cuello.

No olvido de tus abrazos,

Donde se extendieron nuestro cariño.

 

No olvido de tu ruisueña mirada,

Que me vuelve loco al ver dos luceros,

Eres maravillosa y te contemplan mis ojos,

Con esas risas de picardía.

 

No olvido de tu sonrisa

Que tienes de innato cada día,

Donde me regalas alegría

Y son resaltadas tus mejias.

 

No olvido de tus adorados besos,

Que son dados por bellos labios,

Realizando mordidas  pausadas

De esas que se envuelve con tanto cariño.

 

No olvido tu forma de ser,

De ángel caído del cielo,

O de una grandiosa modelo,

Pero de seguro eres para mi,  una bendición.

 

Juventino Pérez