Morir de amor... morir amando
Aquella que un día su sola presencia
Colmó de alegría las noches y los días
Simples momentos, a veces instantes
Con una sonrisa, una tierna caricia
Un beso furtivo... una mirada...
Morir amando... lo que no se olvida
Lo que ayer fuera un intenso fuego
Que aún está latente como llama viva
Que quema todavía y eriza la piel
Que conmueve... y que nunca muere
Morir de amor es una agonía
Con el amor presente como letanía