Mirando para abajo
Desde mi ventanita
Veía pasto verde,
Montañas y ovejitas.
Las nubes que desfilan
Debajo del avión
Son blancas y tranquilas,
Color del algodón.
Sentada en la canasta
Que forma mi poltrona
El mirar para abajo
Es cosa de matrona.
A veces se veía
La luna entre los montes
Reflejada en los lagos
Que trae el horizonte.
El canto de los grillos
Saltando en los montones
De piedras que reflejan
La luz de los faroles
Se puede adivinar
A pesar de motores
Que rugen sin parar
Dentro de los aviones.
Otro viaje de sobra
A visitar un hijo,
La nieta y la familia
Entre montañas bellas.
Que se puede alcanzar
En rutas que se estrechan
Entre la costa del mar
Y la ciudad de perla.