¡A los niños que lloran!
(Seguidillas con Bordón)
FRÍO EN LOS HUESOS
Siete años a la espalda,
mi abrigo el frío,
ayuno en las mañanas,
negro el camino
cargo sin miedo,
la leña en mi costado,
pies que no siento.
Un queso que me dan,
hoy como pago,
contenta se pondrá,
no habrá enfado,
mirando el queso,
mis tripas saltarinas,
se lanzan besos.
Me queda una gavilla,
aquí en el horno,
si consigo venderla,
día redondo
¡Dios que alegría!
me da cuatro reales
¡viva mi vida!
Mi madre frente al fuego,
con el puchero,
llegando estoy contento,
con este queso,
la quiero tanto,
mi padre está en la cárcel,
y yo descalzo.
Los ojos se le salen,
de las pestañas,
sus manos tejen chales,
siempre hasta el alba,
para unos días,
tendremos desayuno,
o cena fría.
Me mira la chaqueta,
y llora al cielo,
la lana no le llega,
a un jersey nuevo,
beso su frente,
me abraza con tristeza,
se que no puede.
Quizás cuando sea grande,
le compre un velo,
donde cosen sus chales,
del estraperlo,
será mi madre ,
la más guapa de todas,
las de la calle.
El sueño ya me vence,
me entrego a él,
mi hermano abraza fuerte,
mi delgadez,
huesos calientan,
al frío de la noche,
que nos contempla.
Queso fresco me espera,
hoy me levanto,
trabajaré en la sierra,
como un esclavo,
pero caliente,
chaqueta de borrego,
hasta las sienes.
Mi madre no durmió,
ni unos minutos,
tejió sin sofocón,
cada segundo,
de mil colores,
chaquetas con amor,
a sus varones.
Autora: Dolores Egea (Lolaila)
NIÑO ABUNDANTE
Extraño tu sonrisa,
tu risa extraño,
tu cara y la caricia,
lágrima y llanto,
-niño del agua-,
son de niño abundante,
sonrisa escasa.
Perdida la mirada,
sin miramientos,
porque nada te aguarda,
bruma y desierto
en ti va escrito:
niño, ser ambulante,
nunca ser niño.
La guerra en ti se aloja
sin culpa alguna,
te golpea y te nombra;
no existe duda
viene a tu encuentro,
a tu lado, delante,
el desconcierto.
Vive el odio en tu cara
grabado a fuego:
¿por qué llevo esa marca
del desconsuelo?
Vuela un lamento,
roto, mudo el semblante,
niño del miedo.
¿Dónde van mis hermanos,
-preguntas- padre?
¿dónde, madre, los rayos
del sol más grande?
¡Y el solidario
gesto del caminante!,
¿dónde encontrarlo?
El alma de mi pueblo,
-grito espantado-
de tanto hartazgo, preso,
ya desalmado,
¿mira sin ojos?,
¿pero no ve, insultante,
niños sin rostro?
Va tu mañana en soles
desdibujada,
corazón en amores,
luna en el alba,
blanco en asedio,
testigo itinerante,
mudo y pequeño.
El hambre te acorrala,
te sitia y grita,
como negra bandada
que en torno gira:
pobre sin suelo,
niño, tu andar errante,
pasto del sueño.
Tierra de promisión,
cielo y promesa,
insondable canción
que suena y llega;
tierra soñada,
tan cercana y distante,
dulce y amarga.
Si allí pudiera, niño,
beber tu llanto
y en tus ojos, el brillo,
sin sobresaltos,
viera en tu cara
tu sonrisa gigante,
tu risa larga.
Autor: Gonzaleja
PIECITOS DE BARRO
Piecitos barro y luna
cruzan la calle.
Mirada triste y pura
falta de madre...
De espuma y tiempo,
enjugando humedades
de ojitos secos.
Hambre de amor y trigo
tu pan mohoso...
Invierno crudo y frío
pantalón corto
Carita sucia...
tu infancia es letanía,
bajo la lluvia.
Diez piezas plomo y bronce
llanto y desgarro
de aquel nido de amores
en el que entraron:
violencia y duelo...
Huérfanos retoñitos
muertos de miedo...
harapos con la marca
de amor paterno
de sangre está bordada
cariño inmenso.
Oculto en manos
del padre acribillado
por seis balazos.
Cuatro de las diez balas
dieron de lleno
a la dulce muchacha
de ojos de cielo.
Madre amorosa
protegiendo tu vida
su muerte asoma.
Eran tres hermanitos
quedaste solo.
Terroristas ceñidos
de muerte y robo...
vas por la vida...
con un perro sarnoso
por compañía...
Piecitos barro y luna
cruzan la calle
y mi alma, envuelta en bruma
mira y no sabe
¡tanta desidia,
destrozando familias
con injusticia!
Piecitos barro y luna
en llaga viva
la vereda te acuna
y nadie mira...
¡Toma mis manos,
ven, Piecitos de barro,
llora en mis brazos!
Hay sitio en mi morada,
Dios me ha pedido,
brindarte amor y cama
¡seré tu amigo!
-yo he sido, otrora,
un \"Piecitos de barro\"
y hoy Dios me arropa...
¡Hay tantos pequeñitos
moquito y lodo,
mas sus corazoncitos
son plata y oro!
¡Almas preciosas
rayitos de esperanza
divinas joyas!
Autor: §°Adrián_Hulusi°§
TRES PRIMAVERAS
Tan sólo floreciste
tres primaveras.
¡Malditos los fusiles,
maldita guerra!
Tu cuerpo frío,
acunado en mis brazos
lo siento vivo.
Las delicadas joyas
de tus mejillas
son dos pálidas rosas;
niegan la vida,
las voy regando
con gotas de rocío;
callado llanto.
Blanca como la luna
te has elevado,
dejas mi alma entre brumas,
triste y llorando.
En la negrura
del dolor por tu muerte
mi pena hurga.
Tu cuerpo fue mi escudo
sin yo quererlo,
todo se volvió oscuro
temblé de miedo,
mi pecho ardía;
y tu sangre en mi sangre
estremecida.
Fui tu cuna y tu casa
por nueve meses,
te mecí en mis entrañas
miles de veces...
Te di la vida;
deja que te acompañe
me necesitas.
Una casa en las nubes
te hace tu madre,
miles de estrellas lucen
y de amor arden.
Estoy contigo
no recorrerás sola
este camino.
Será un camino bello,
toma mi mano.
¿Ves la luz a lo lejos?
Hasta ella vamos.
Mi niña ríe,
con ella van jugando
dos querubines.
Vamos por el camino
que al cielo lleva,
hay flores en racimos
huele a canela.
Ven, dame un beso,
que un beso tuyo vale
mil universos.
Ya estás mi niña guapa
junto a Dios padre,
Él te acoge en su casa;
yo he de marcharme...
Nunca te olvides,
del amor de tu madre;
en el que vives.
Autora: Jarablanca