Llegaste hermosa muchacha de ojos tan bellos
Desde la inmensa distancia y aun sin conocernos
El cómplice tiempo detiene diálogos y profundos silencios
Tu voz refleja posible timidez y algunos miedos...
Me dices que eres romántica y que lees cuentos
Allí en la intimidad a tu almohada, le dirás tus sueños
También que quizás algún día, tendremos un encuentro
En la playa tal vez contemplaremos el amanecer eterno...
El sol se reflejará en tus claros ojos, encandilándome como fuego
Y tomaré tus manos y preguntaré al infinito universo
¿Eres tú la sensible y dulce mujer, que espere tanto tiempo?
O solo serás la mutable ilusión que se lleva el viento?
Oh! tierna muchacha, igual te abrazaré con mimos y besos
Y así extasiados nos cubrirá el cielo, con su celeste velo.