Llego, desde el más allá
como escapando del frío
el recuerdo de un adiós
que nos convirtió en olvido.
En él, regreso tu voz
susurrándole a mi oído
una palabra de amor
un acallado suspiro.
Y volvió a brillar el sol
tanto tiempo oscurecido
a latírme el corazón
a olvidarse del vacío.