Adnea

SER MUJER

Cuando nace una mujer casi siempre tiembla el padre

porque sobre él recae la formación de una futura madre

una madre que ante todo es mujer y por ello diferente

que buscará su lugar en este mundo, a veces hiriente.

 

Una mujer de pequeña es delicada y débil ante otros

pero si está en confianza puede tener muchos rostros

rostros llenos de sonrisas, de fuerza y hasta de pena

que nos ganan el corazón cuando aún es una nena.

 

Al crecer de tamaño y de edad son cada vez más fuertes

piensan, organizan y actúan sin dejar nada a la suerte

todo problema siempre lo solucionan con otros hablando

o encontrando en el camino lo que andaban buscando.

 

Ya en la juventud tienen la fortaleza para salir al mundo

y buscar en él, que su corazón sea como un pozo profundo

para albergar cariño, bondad, experiencia y caridad

que a la larga le servirá para descubrir la felicidad.

 

Cual fruto maduro en esta etapa una mujer se establece

si será fuente de inspiración que a otros ennoblece

o tendrá en sus manos mayores responsabilidades

como el de ayudar a otros a calmar sus tempestades.

 

Mujeres en todas sus etapas siempre buscan algo nuevo

formar a otras para que en un futuro sean su relevo

llenas de vitalidad, de inteligencia y sentimiento

son en la vida las que inspiran este sentimiento.