Llueves.
Nadie lo percibe, pero llueves.
El destello cansado de tus ojos,
la arquitectura pétrea de tu sonrisa,
insignificantes gestos y el tono de tu voz
te delatan , solo yo puedo verlo...
Puedo verlo.
Si confias y compartimos el lenguaje de los gestos
con una mirada, un imperceptible guiño,
un suspiro, un roce de manos o lo que suceda
voy -si me lo permites- a desperezarte.
De un soplo desapareceran tus nubes,
tu ayer de tormenta sera un hoy luminoso.
Puedo hacerlo,
Si todavia permaneces, usare mi magia,
escuchare la palabras que nunca has dicho,
conocere el significado de la esencia de tus lagrimas,
Con un puñado de tiernos susurros
percibirás el tesoro secreto de tu misterio.
Te conozco.
He explorado la geografía de tu sentimiento,
navegado tus ríos, escalado tus montañas.
Quiero decirte lo absoluta que sos,
tan inédita, tan genial quiero que te sientas
al punto que pienses que soy poco para vos.
A.C.F 2-12-2017 ARGENTINA