Medí el tamaño de tus senos
eran pequeños
se perdían entre mis manos cóncavas
¿(cuánto tiempo dormí entre ellos)?
Que aún el aroma
en mis labios lo conservo…
Todavía paseo mis dedos sobre la sombra de ellos
y dejo que el pezón se ponga erecto
pero todo aquel recuerdo
es un silencio.
No hablo de tus senos -simplemente-
como un fragmento de tu carne
hablo de ellos porque fueron
el almíbar a mis ansias deseable.