Jose Luis Posa Lozano

PLEGARIA EN REBELDIA

No te pido un camino de rosas, tan solo que sea largo,
fuerza para andarlo con dignidad, sin arrastrarme
y buena compañía para los días de espinas
y para los días de rosas.

No te pido riqueza, tan solo sabiduría para no desearla,
compasión para el compañero caído,
ternura para las penas del alma
y cariño para iluminar el cielo.

No apartes de mí ese cáliz si he de beberlo
pero no dejes que derrame su amargura
sobre quien me acompaña.

No te pido luna llena en mis noches oscuras,
tan solo una estrella
que me recuerde que aún estás vivo
o que aún estoy vivo para ti.

Y por último, aparta de mí los miedos, los rencores,
dame el valor para dudar de ti,
para no resignarme a la dictadura de tu omnipotencia
y para no maldecirte cada vez que un niño muere,
cada que un pueblo es masacrado por los dioses
o por hombres que se creen dioses.

Hágase tu voluntad, porque no puedo oponerme,
pero no me pidas que la acate sin pedirte cuentas,
sin juzgarte y sin condenarte, y sobre todo
dame la capacidad de perdón, para poder perdonar
a mis enemigos y a mis carceleros,
para poder perdonarte incluso a ti,
para intentar perdonarme a mí mismo.