Hoy se cumplen doscientos años de la agitada semana que comenzó el dieciocho de Mayo, y finalizó con la salida del pueblo en la lluviosa mañana del veinticinco con el grito: "El pueblo quiere saber de qué se trata", y la formación de la Primera Junta de Gobierno.
Desde este lugar sagrado saludo a todos los hombres libres del mundo. Ojalá que cada uno tenga su Jerusalén.
Cultivo una rosa
El rosal de mi jardín
tiene una sola rosa
para darla a mis amigos
cuando decida partir.
¿Por qué debe ser así?
Se quejó una voz interna
tienes tú muchos amigos
que querrían esa rosa
bañada de amistad.
Entonces,
se la daré a mi madre
para que ella decida
cual es el mejor amigo
merecedor de esa rosa.
En el lugar celestial
en que todo es pureza
no hay lugar para que dude;
justa será su elección
de uno entre iguales.
A ese que represente
a todos en la amistad,
en ese mismo instante
le dará su bendición
y la rosa entregará.