Menesteo

¡¡¡Doce años...una vida!!!

Era ya de madrugada                                                                                                               (2)

Cuando llegué a mi destino,

Tras un inmenso camino

Saliendo desde la nada.

En la noche solitaria

De una ciudad sin abrigo,

Yo parecía un mendigo

Debajo de luminarias.

Amaneció la mañana

Cubierta de nubes grises,

Envolviendo mi alma triste

Cuál redoble de campanas.

Un imponente edificio

Ante mí se presentaba,

Mi destino me esperaba

Para empezar con mí oficio.

Fueron pasando los días

Hablándonos por las cartas,

Por teléfono eran citas

Con mensajes a su casa.

Cuanta alegría nos daba

Esa voz en la distancia,

Sabiéndonos a fragancia

Los besos que nos llegaban.

Promesas hechas en cobre

Llegando del norte al sur,

Como un caballo andaluz

Desbocado por su nombre.