\"Mis años ya son otoño
que reverdecen en tus brazos\"
Seduces mis instintos de ágil felina
cuando vendas mis ojos,
y en la oscuridad, cada poro
de mi piel, son dilatadas pupilas
de sensaciones que se encienden
con cada roce de tu cuerpo...
el sólo sentir de tu proximidad,
tu aliento que arde tras cada gemido,
tu piel infernal con olor a deseo,
tus besos con sabor a sal
después de haber recorrido el averno,
cada segundo en tus brazos previos
a la arremetida de tu sexo,
provocan en mi cuerpo
la postura perfecta con ritmo sofocante
para extraer de ti
hasta la última gota de tu hombría,
pero te gusta ver mis ojos llameantes,
así que antes de fluir y perdernos
en el delirante mundo de gemidos
dejas que mi sentido de la vista
se deleite en esos ojos café, profundos,
dominantes de deseo,
es ahí donde mis pezones como
volcanes se erizan como fuego,
suplicantes a tus manos y besos,
es ahí donde mi entrepierna,
como mar en tormenta,
suplica que naufrages...
mientras yo con mis años de otoño
danzo entre las hojas del bosque
con la musicalidad rítmica
de los ecos del abismo de gemidos.
Derechos de autor Alma Libre
Santiago de Chile
16-04-2017