Estoy contigo, mirándote a los ojos.
En ellos veo sinceridad.
Alegría. Candor. Inocencia.
Juventud. Lágrimas. Piedad.
Amor...
Tus ojos me transmiten
felicidad. La de reflejarme en ellos.
Felicidad de poder contemplarlos,
guiándome por el camino
de la luz... que había perdido.
Viviendo en una
interminable tiniebla.
Aborreciendo todas las injusticias
que ELLOS, el PODER de esta
pobre gente que gobierna
nuestros argentinos días.
Tú les has de dar fuerzas
Señor, para que entren en razón,
y dejen de amargar la existencia.
Mirándote a los ojos
siento paz, ahora siento paz...
El ayer, mejor olvidarlo...
triste y trágico a la vez.
Por las ausencias, las injusticias,
el hambre, la maldad,
las muertes injustificadas,
los robos, los crímenes...
Que todavía existen.
Pero yo Señor, en nombre de todos,
vengo a pedirte, mirándote a los ojos,
que ELLOS nos permitan tener paz.
La que hemos perdido.
La que soñamos volver
a recuperar. Cada vez peor estamos.
Delante tuyo, Señor, mi alma calma logra.
Mirándote a los ojos.
Pásame tu mirar a los míos.
Imprégname de su resplandor.
Ciego de realidad he estado.
Deja que en mi retina
tus ojos permanentemente estén.
Con tu PODER de PADRE,
irrádianos con tu luz
a todos los seres
de este mundo que tú creaste.
Vengo a decirte,
mirándote a los ojos,
que no tenemos la intención
de ofenderte. A veces, nosotros,
no sabemos lo que hacemos.
Tal vez será porque nos olvidamos de Tí.
Llámanos la atención Señor...
Baja hacia nosotros... los creyentes
te estamos esperando.
Jesús, mirándote a los ojos estoy,
haciéndome responsable,
en nombre de todos
los que te amamos,
de todo lo que te estoy
pidiendo. Que tu luz
concientice a los responsables
de sus irresposabilidades.
Inyéctales parte de tu CORAZÓN
Jesús. A los que gobiernan
y a nosotros, los gobernados.
Trataremos todos de unirnos
a TÍ. Los que te amamos,
e invitaremos a los que no tanto,
lleguen a tu presencia.
Imaginaria o perceptiva.
Pero de CORAZÓN.
Déjame expresarte la inmensa
felicidad que siento aquí,
delante tuyo, mirándote a los ojos.
Todo mi cuerpo se estremece...
porque tus ojos me miran,
y yo miro los tuyos.
Noto en ellos dolor y alegría
al mismo tiempo.
Son los ojos DEL AMOR DIVINO.
Mirándote a los ojos,
te pido piedad Señor.
No quiero pecar de egoísta.
TEN PIEDAD DE NOSOTROS,
y envíanos TU LUZ.
Envíanos PAZ. AMOR hacia nuestro semejante.
GRANDEZA en nuestra alma.
A cada uno de nosotros.
Si no nos amamos, realmente
no podremos estar UNIDOS.
Te agradezco tanto que
me recibas, Señor.
Agradezco esta PAZ que me dás.
La necesito. Y te pido
se la otorgues también
a todos mis HERMANOS del mundo.
Que podamos estar UNIDOS,
y vencer los miedos
y terrores que los malos
nos imponen.
Tú nos comprendes...
Pero nosotros, a veces, te fallamos.
Me hago cargo. En mi nombre.
El que no esté de acuerdo conmigo,
mejor lo calle.
No quiero sembrar
DISCORDIA sino AMOR.
Por eso te pido nos ayudes.
Que dejemos de tener RENCORES.
QUE NOS AMEMOS MÁS,
que SIEMPRE estemos unidos
para nuestra felicidad.
La que hoy yo tengo al
estar aquí, delante tuyo Señor,
MIRÁNDOTE A LOS OJOS.
Teniente del escenario
12-09-2012