Esteban Mario Couceyro

El próximo amanecer

Si pudiese tomar tus manos

y mirándote a los ojos

en un interminable silencio

comenzar a decir

que te amo.

 

Cómo vería suceder los días

mientras el beso

sea eternidad confundida

en dolorosas promesas.

 

Mis manos cada vez más

aferrándose a la nada

de tu cuerpo muerto

el aliento finito

en inmenso llanto

y un, no me dejes

si ya no estoy.

 

Es una mañana luminosa

me dijeron

y quedará acá

tu vida es la de ella

y debes continuar.

 

Regresé sabiendo

que una parte de mí

no estará

que no seré yo

otra vez al amanecer.