Entre citadinos reunidos por charlas y café de por medio, estaba ella ...
Simplemente vi sus resplandeciente ojos diciéndome ven mirame, bien fijamente ...
Hay me di cuenta la inmensidad de su tersura .,
< A mi desconcierto >
Con su ternura ella me dirijia para opserva su transparente y reluciente Alma ..
Tan dulce ...
Tan inmune ...
Tan apasionada...
Que no pude contenerme en abrazarla ...
¡ Juro que cielo , Mar y estrellas !
dejaron de resplandecer opacados por nuestro propios destellos de un nuevo Amor ...
Después, todo fue tan simple , nuestro cuerpos inertes por nuestra inmenza pasión no tubo otra opción en seguir nuestros corazones palpitante , dejando atrás todo vestigio de fisura contraída de corazones pasados que no supieron ver más allá que densas figuras sin escudriñar lo más hermoso que ella tenía .,
\" Su Alma \" .
J.RICARDO PEREA