facundo perkins

Caminante

 

 

  El caballero de la orden de las piedras

afiló su gajo hirsuto y despiadado

cuando la noche respiraba calma

desmembró las madreselvas de esperanza.

 

Sintió en sus savias ocres , silvestres y milenarias

la pesadilla recurrente   de ser hacha

el movimiento es un espectro  que te asusta

 te acorrala , te sofoca y  te atrapa.

 

Tus adentros  son raíces ignotas y profundas

sueños de hormigas   alienadas

constelaciones caprichosas que se acorazan 

con urdimbres de subterfugios y avivadas.

 

El rocío de la hiel y el desamparo

forjo con arte tu meollo duro y solitario

tu rigidez de esfinge fortaleció tu traza

   desconoces el estro de las   albas.

 

No parpadean tus ojos  esperanza

no odias , ni amas

inefable el lenguaje de tu alma

solo esperas tu momento

              agazapado en la umbría picada de la desconfianza.

 

De las edades heroicas jamás  recordadas

tu arma ,  tu trampa , tu tiempo

tu mirada agria , epitafio 

   orbitas  sin fondo que aguardan.

Presta esta la pluma en el tintero de tu boca

para tender una creativa emboscada.

 

Tu ser corsario con libertad de albatros

circunnavegó arcádicas singladuras de pasos

eructando sin premura las sinfonías del hambre

por el océano profundo del vasto  Chaco.

 

Eres víctima y villano

troglodita ciceroniano

nadie develará los secretos de tu ánfora

lo ocultarás bajo el humo místico de palo santo.

          

  Cuando arda el tenue fulgor a la distancia

entre ramas cómplices que te guardan

cubierto  con un dosel de estrellas trasnochadas

sentirá su sangre revolcarse en la lava.

 

Eres  venganza vestida de inocencia

  sorpresivo grito que profana

el silencio sagrado del ocaso

             

 

vástago de execrables metales y  engaños

 hijo milenario  de  la virgen horadada

un vaho muerto desborda de tus fauces

llanto  visceral en el monte bajo.

 

respiración depredadora pero aprensiva

puma que amenaza y presa amenazada

eres dualidad informe exiliada 

preso de una modernidad que se te escapa

 mudo balbuceando una balada.

 

 tu brújula será siempre el camino

camina , solo camina viejo hermano

aunque Platón , Aristóteles y los presocráticos

rebuznen en sus tumbas

tu porvenir y el presente es tu pasado.