Alejandro

Escorrentía y condensación

¿Cuantas veces me dijeron que no, a mi, y sobrevivi?

Dame la mano y vení, que te enseño a perder.

Andrés Calamaro


Con el valor que se tiene

cuando se mira un espejo,

así vuela de nuevo un sentimiento,

así camina, se arrastra, se escurre,

se convierte en vapor y se condensa

mutando y mutando hasta ser el mismo.


Y los efectos de la paramnesia

como si saberlo fuera suficiente,

como si el color se pudiera teñir

con sonidos inertes.


Y caer y caer, hasta estar en el cielo

y mirar hacia abajo sin espejo,

luego ser gota,

lluvia volviendo a su nube,

el reflejo en el agua

para ser uno mismo.


Y volver a tejer

paréntesis en los días

para suspender el alma

en una nueva mirada.