Aún sueño vida mía,
con mis manos acariciándote,
excitando tu seriedad.
Encenderme en tu fogosa hoguera, y calcinarme,
hasta que de mi carne
no queden más que cenizas.
Todavía sueño
des articulando mis palabras
en tu intelecto.
Donde descubro tus gentilezas,
de mujer enamorada-
bambam