¿Existe el amor perfecto?
me lo he preguntado seguido
pero esta pareja me ha enseñado
que no tiene que ser perfecto
para ser pleno.
Ella, tenía un cáncer en los pulmones;
él, una especie de leucemia.
Y créanme, cuando les digo,
que no hay mayor poesía en el mundo
como estos dos jóvenes amándose,
dándose todo en cada segundo:
en cada instante de placer eterno,
en cada abrazo ininterrumpible,
en cada beso profundo como el mar.
Aprendamos de esta bella poesía
que son dos almas unidas
bajo la misma estrella,
bajo un amor sin igual.