Me gusta soñar despierto
y soñando poder arreglar
ese corazón tan muerto
que tiene la humanidad.
Niños gritando a sus padres
padres asesinando a sus hijos
la humanidad sin valores
y el sufrimiento sin juicio.
Es como si Dios hubiese muerto
y el corazón de los hombres
ya no tenga un puerto abierto
donde la sonrisa aflore.
Tantas fronteras cerradas
tantas pateras a la deriva
tantas guerras fratricidas
que oscurecen nuestras vidas.
Cuantos niños sin comer
y cuantos ricos opulentos
cuantos que no quieren saber
de los demás el sufrimiento.
En las cárceles los pobres
por robar un trozo de pan
en los paraísos fiscales
el robo de los demás.
Viejos durmiendo en la calle
jóvenes faltos de ilusión
y las balas de los fusiles
apuntando al corazón.
Allí hay una niña violada
niños con fusiles en la mano
cien gobiernos sin justicia
que la navidad ha negado.
Y yo pensando en el pavo
que una navidad comiera
relleno de sueños amargos
por sueños de mis quimeras.
Pero volveré a soñar
aunque falte el fundamento
y no habrá mas hambre en la vida
ni falta de sentimientos.
Ángel Reyes Burgos
https://sonrrisasparati.blogspot.com.es/